7 elementos básicos que debería tener toda Web
Somos defensores de la Web como eje y herramienta principal en la Internet, por delante de las Redes Sociales. No hay que olvidar que estamos entrando en el Internet de las Comunidades, para pasar al Internet de los Servicios/Usuarios… No pasamos por alto la relevancia actual de las plataformas sociales, pero tampoco somos partidarios de ceder todo el control de “nuestra comunidad” a una empresa externa, fuera de nuestro control. Hay que encontrar el punto de equilibrio adecuado.
Estos 7 puntos, están agrupados según nuestra opinión basada en el día a día con distintos clientes y sectores. Aunque dependerá en gran medida al negocio en cuestión y sus objetivos en Internet, existen algunos elementos básicos que nos gustaría compartir:
1. Orientada al Usuario:
Primero al Usuario (sí, las personas que visitaran la página Web) y, como consecuencia, al público objetivo. Que en un primer vistazo se sepa quién eres y qué haces. Puedes apoyarte en elementos creativos como ilustraciones, colores, fotografías, etc., pero nunca hay que olvidar que si se ha generado una visita, es por algo… También en este punto es interesante observar que no todas tus visitas serán mediante Firefox, por ejemplo. Cuidar los detalles según los navegadores y dispositivos debería ser un must!
2. Usabilidad en la Navegación:
Los usuarios “escanean visualmente” una Web a una velocidad demasiado elevada. Son ya famosos los estudios sobre el Triangulo de Oro en Google (resultado patrocinado y 1-2 resultados naturales), sobre la importancia de las esquinas superiores en la izquierda o sobre el zig-zag de los ojos: los patrones en forma de F. Existen distintos elementos que pueden ayudar a mejorar la Usabilidad en la Navegación que no deberían quedarse en el olvido. Algunos de ellos podrían ser el uso de distintos tamaños de tipografías para presentar un concepto, un orden jerárquico en la organización de secciones (las más importantes, siempre primero) o un correcto uso del color para la atracción visual del usuario, siempre de un modo claro y conciso.
3. Aprovecha el Contenido:
Este es uno de los elementos básicos que cuesta más de encontrar, ya que supone una carga de trabajo extra. Nos referimos a que si una empresa tiene un know-how adquirido en algún campo ¿por qué no lo aprovecha también en su web? Un contenido relacionado, profesional, actualizado… tiene un valor extremadamente alto. Ya sea en formato blog corporativo o en la continua actualización de secciones/novedades/ofertas/etc. No hay nadie mejor que tú para vender tu propio producto-servicio.
4. La famosa conversión:
Entramos en un elemento clave, la conversión. Primero, será necesario definirla: conseguir un nuevo cliente, un nuevo lead, una recomendación, un click a la sección clave… Tiene tanta importancia su definición como su propia consecución (y análisis posterior con Google Analytics). De lo contrario, sería “ir a ciegas”. Podemos utilizar recursos creativos que obliguen al cerebro del visitante a prestar un poco más de atención para acabar atrayéndolo dónde nos interese. El uso de negritas, cursivas, imágenes, vídeos, contrastes y, sobretodo, botones, hacen que la conversión ocurra de un modo casi natural y útil para el usuario.
5. Pensando en los Buscadores:
Si el usuario no te encuentra en los buscadores, tenemos un problema. “Capitán Obvio” en toda regla, ya que para entendernos, diseñamos para el usuario y programamos para el buscador. Habitualmente, los buscadores generan un porcentaje elevadísimo del total de visitas, así que más vale optimizar todos aquellos detalles que generen una visita de calidad. Es decir, si busco un tipo de servicio concreto, no me gustaría llegar a la página de inicio de un proveedor… me gustaría llegar directamente hacia aquello que estoy buscando. Todos los elementos internos de la Web deben remar en la misma dirección, deben sumar (así entendemos el SEO).
6. El Primer impacto:
No tendremos una segunda ocasión de causar un buen primer impacto, así que hay que cuidar estos detalles. Desde los primeros inputs que presentamos hasta el tiempo de carga de la Web. Existen distintos estudios que explican que el tiempo de decisión de permanencia en una Web son 7 segundos. Hace poco, salió otro estudio que comentaba que eran 5. El escaneo del usuario es cada vez más rápido. Entendemos la Web como un eje principal de todas aquellas acciones de Marketing Online, como una herramienta propia a la que se le puede sacar mucho rendimiento, aunque…
7. ¿Tenemos en cuenta las Redes Sociales?
Tampoco podemos dejar de lado las herramientas (externas) sociales, como Facebook, Twitter, Youtube, Google+, Pinterest… Indudablemente, hay que tenerlas presentes y las mostraremos en la Web según el grado de importancia que les queramos otorgar. En este punto, es interesante remarcar que, si hemos atraído una visita a nuestra Web, ¿es realmente necesario “enviarlo” a una plataforma externa? Somos partidarios de que una visita a nuestra Web sea ya un objetivo cumplido.
No son los 7 elementos únicos, existen muchos más, mejor explicados y más concretos según el tipo de negocio. Pero, si tuviésemos que explicar a un Cliente los elementos básicos que debería tener su Web, serían estos sin duda.
Me GUSTO MUCHOOO, AUNQUE UN POCO LARGO PERO VALE LA PENA!!!
Muy buen contenido!
Muy bueno.Me sirvió mucho .Gracias!!
muy bueno me sirvio mucho ….